Todos estamos creando nuestra realidad en todo momento, lo hacemos a través de nuestras creencias, intenciones, acciones, decretos entre otros. Vivir una vida plena se hace mucho más fácil cuando entendemos de qué forma nuestra realidad interna y externa se vinculan. Los decretos conscientes son una forma en que aprendemos a comunicar lo que deseamos a la “existencia”.
Visto desde el ángulo de la Creación Consciente un decreto es una afirmación + intención.
La afirmación es aquel aspecto que se relaciona con el uso de la palabra hablada, escrita o pensada. En definitiva, es la “forma” que le damos a una energía en específico. La intención por otro lado, es la energía en sí, el sentimiento (emoción) asociado a obtener eso que queremos.
En otras palabras, un decreto consciente es una forma de comunicarte con aquella parte más expandida de ti mismo para atraer a ti algo que deseas.
Como constante estudiosa de estos temas, profesora y testigo de cientos de historias personales, de alumnos y clientes puedo decir que los decretos funcionan. Ahora bien, hay ciertos consejos que pueden ayudarte a ser más efectivo. A continuación te regalo los siguientes 3:
1. Conecta con la sensación: Todo lo que quieres siempre tiene relación con cómo te quieres sentir una vez que tengas eso. Por lo tanto, cuando hagas un decreto conecta siempre con la emoción que imaginas que tendrás una vez te llegue eso que estás pidiendo. Si puedes, vive tu día a día cultivando esa energía aunque no haya llegado lo que buscas, la clave es sentirte pleno “hoy”, esto hará que atraigas más cosas buenas para ti por ley de atracción (similar atrae lo similar).
2. Se específico: Si bien puedes decretar siendo general (ej: quiero un hogar) y eso está perfecto, ser específico te ayuda a conectar y expresar con lo que realmente quieres (ej: quiero un hogar en la playa de 100m2, con vista al mar, de color blanco y estilo mediterránea, etc). Varias veces me ha pasado que he decretado sin ser lo suficientemente específica y ¡poom! Llega, pero no era lo que realmente quería. Como por ejemplo cuando manifesté un “marido” (refiriéndome a que quería una relación seria) y a los 10 días conocí a un chico que se había divorciado hace unos meses y por lo tanto legalmente era un “marido”.
3. Redacta en positivo: Cuando comunicamos algo a la existencia, el mensaje más poderoso es el energético (fondo) más que la forma. Por ejemplo, no es lo mismo decir “no quiero más dolor” a decir “quiero tener salud”. En la primera frase, energéticamente estoy comunicando “dolor” y en la segunda “salud”. Solo al leer cada una de estas palabras podrás notar la diferencia de cómo se sienten en tu cuerpo.
Finalmente, recuerda que si algo que pediste no ha llegado a ti es necesario que trabajes en tus bloqueos. Estos en general son creencias contractivos subconscientes que no te sirven para lo que quieres crear y/o atraer a tu vida.
Cuando aprendemos a decretar + desbloquear lo que nos limita los resultados son sorprendentes.
Te invito a ponerlo en práctica con el simple ejercicio de tomar un lápiz y un papel y escribir una lista de lo que quieres.
Y si quieres saber más sígueme en @javiera.correa_ y www.javieracorrea.com
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Javiera Correa